A eso de las 2 de la tarde, se dio una falsa alarma, mucha gente corrió y algunos lo hacían y no sabían lo que pasaba.
Esto sucedió porque una de todas estas personas inventó que alguien se había ahogado. Esta es una muestra de aquel dicho tan conocido que dice: “A donde va Vicente, va toda la gente”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario